Archivo de la categoría: Veracruz

Miguel Contreras Torres, Esperanza Iris y El Gallo (1923)

La fotografía fue tomada en Veracruz y se publicó en Cine-Mundial de enero de 1923 (Vol. VIII, No. 1, p. 31). En ella aparecen tres figuras públicas mexicanas de los años 20 del siglo pasado: el director y actor Miguel Contreras Torres, la actriz de opereta Esperanza Iris y El Gallo, maestro del toreo.

Cine-Mundial de enero de 1923 (Vol. VIII, No. 1, p. 31)
Cine-Mundial de enero de 1923 (Vol. VIII, No. 1, p. 31)

El cinematógrafo en el estado de Veracruz (1912)

Dos medios impresos norteamericanos publicaron la misma nota sobre el negocio del cinematógrafo en el estado de Veracruz. Primero, el Motography de enero de 1912  (Vol. VII, No. 1, p. 22); segundo, The New York Clipper de mayo 4 de 1912 (Vol LX, No. 12, p. 4).

Aunque con cuatro meses de diferencia la nota es la misma, lo cual muestra que las noticias sobre el cine en México eran poco difundidas en Estados Unidos y los medios «refriteaban» las mismas notas. Cabe destacar la ortografía que utilizan: Vera Cruz, misma que siguieron utilizando hasta bien entrados los años 20.

Si bien el negocio era relativamente bueno, la novedad del mismo iba en descenso y lo combinaban con teatro, danzas españolas y otras variedades. En el puerto, el único establecimiento dedicado enteramente al cine era el salón de Variedades, el cual utilizaba un cinematógrafo de la marca Pathé.

En el puerto de Veracruz sí se proyectaban películas de buena manufactura, pues el público no aceptaba cintas viejas o de mala calidad. Hacía tiempo que los cinematografistas itinerantes tenían presencia en la ciudad y la gente ya se había acostumbrado el buen cine. Ejemplo de ello, fue una función que tuvo en su noche de estreno alrededor de mil personas; la siguiente noche, tan solo seis.

Las ciudades veracruzanas con población entre 2,000 y 35,000 habitantes eran visitadas por cinematografistas itinerantes quienes se proveían de películas y aparatos con la Compañía Cinematográfica Explotadora.

Destaca el reporte consular que las películas americanas eran poco entendidas debido a la idiosincracia del publico,  situación que no sucedía con el público capitalino, más habituado a ese tipo de cintas.

Veracruz circa 1915. Foto: Colección Allen Morrison
Veracruz (circa 1915). Foto: Colección Allen Morrison

Shows in Vera Cruz

Consul William W. Canada, of Vera Cruz, Mexico, writes that moving-picture shows in his district, while still patronized, have long since ceased to be a novelty. In Vera Cruz, population about 50,000, the largest city in the consular jurisdiction, these shows have  taken second rank in the estimation of the majority of the people, and wherever such a performance takes place it is in combination with a more or less theatrical enterprise. Spanish dancers, farces, and general variety business are the principal attractions at present. The Salon de Variedades is the only permanent place of entertainment of this kind in Vera Cruz.

As far as he is informed, other towns of comparative importance, as, for instance, Jalapa, Orizaba, Cordoba, Coatepec, Cosamaloapan, Tlacotalpan, Alvarado, Tuxpan, Papantla, Huatusco, Rio Blanco, and others of 35,000 down to 2,000 inhabitants, have no permanent moving-picture shows. All these places are visited at slated intervals by traveling exhibitors, who do not even own apparatus or films, but are fitted out by the Compañía Cinematográfica Explotadora, Mexico City.

The Vera Cruz show operates a Pathé apparatus, and nearly all films shown are from the same concern. At long intervals only are American films shown. The fact is that, with few exceptions, pictures of American scenes are never well understood. This is due to the lack of familiarity with conditions as they exist in the United States, and also because the humor or pathos, as the case may be, represented on French films is of a nature that appeals to the people. In Mexico City, where the American element is better represented, matters are different.

It is worthy of mention that the films shown in Vera Cruz are all first class. There is no exception to this. The town has been worked by traveling shows for so long a time that the people will not now accept anything ancient or of inferior grade. This determination of the citizens to insist upon the best was exemplified some time ago when, upon the opening night of a show, well-advertised, over 1,000 persons attended; the succeeding evening, when the show was repeated, there were but six persons in the theater.

 

Cinematógrafo en Veracruz (1917)

Durante 1917, la revista Cine-Mundial publicó dos notas sobre el cine en Veracruz; una sin firma y la otra del corresponsal R. A. Miranda. La primera, enviada por un corresponsal desconocido en febrero, se publicó en el número de marzo (Vol. II, No. 3, p. 138) y se concentra en los establecimientos dedicados a la exhibición de películas y por lo que podemos leer, el negocio no es boyante, todo lo contrario. Un par de cines, el Eslava y el Principal ya no exhiben películas; el primero cambió de giro y el segundo está cerrado. 

De Veracruz

En el «Salón Variedades,» que frecuenta nuestra mejor sociedad, hemos visto las siguientes películas: «El jockey de la muerte» de la serie Lind; «El Doctor Mefistófeles,» de la NORDISK; «La señora de la mariposa negra,» de la CORONA FILM; «El tres de corazones,» estreno, interpretada por Cleo Madison, la cual ha sido exhibida en la mayor parte de los teatros de esta capital.

La nueva casa de Malpica y Martínez empezará pronto a importar películas en series.

El Sr. Pedroso, antiguo empresario del Olimpia, tiene en proyecto la construcción de un nuevo teatro cinematográfico donde estrenará lo mejor que se produzca en la industria.

El «Salón Eslava,» por falta de actividad de su empresario, ha venido a parar en sala de Tómbola Oriental, y es muy frecuentado por el público.

El «Principal,» el mejor teatro que tenemos, se encuentra cerrado pero se espera que pronto se iniciará una buena temporada y que se exhiban en él las novedades que traiga el Sr. Pedroso.

El Corresponsal. Veracruz, Febrero de 1917.

Cleo Madison en su faceta de directora. Imagen: Silent Era
Cleo Madison en su faceta de directora. Imagen: Silent Era

La segunda nota, firmada por el corresponsal R. A. Miranda en marzo, apareció en el número de mayo de 1917 (Vol. II, No. 5, p. 246) y hace una reseña de lo que acontece con varios cines del puerto. Resulta intrigante que uno de ellos, el Eslava, haya sufrido un atentado y debido a ello el empresario que lo administraba, A. P. Pedroso tuviera que ceder los derechos del Olimpia y del Eslava a nuevos inversionistas; el Principal sigue cerrado.

De Veracruz

A pesar de las comunicaciones que dificultan traer películas las empresas de esta ciudad están haciendo prodigios para tener contento al público que diariamente frecuenta los coliseos.

SALÓN VARIEDADES — Este cine se encuentra bajo la dirección del simpático empresario Sr. Aurelio Lechuga, quien después de visitar los Estados Unidos y Europa, lo ha reformado grandemente, produciendo la impresión de un teatro de París o Nueva York.

Las películas de más atracción estrenadas en este lugar fueron: «Mi vida por la tuya,» interpretada muy bien por María Carmi y Tulio Carminalli; «Lágrimas que redimen,» por Francesca Bertini— llamada por la sociedad veracruzana «La emperatriz» de la escena muda; «Los misterios de Myra,» cinta en 15 episodios de gran éxito, con la que la empresa debió ganar un dineral. Durante muchos días estuvo puesto en taquillas el letrero de «no hay boletos»; «Los misterios de la embajada» fué también una película de magnífico triunfo, que consumió un derroche de lujo y de dinero. Al terminar la presentación de esta cinta apareció el popular luchador japonés Conde de Koma, y luego el notabilísimo trío «Los sibaritas,» que se ha hecho acreedor a la simpatía general. «Gandolín,» actor y transformista, debutó con maravilloso éxito.

EL OLIMPIA — Magnífico salón. Es admirable la labor de los empresarios Camus y Ruiz, que se quedaron con este teatro al abandonarlo el Sr. A. P. Pedroso, que fué víctima de un accidente. Dichos señores hacen esfuerzos sin precedente por atraerse al público. Han contratado una orquesta inmejorable, que dirige el conocido músico Severiano Pacheco y el notable Albertico. En cuanto a películas nos han dado varios estrenos: «Tragedia del destino,» en cuatro partes; «León de la sierra,» interpretada por el actor español Jaime Borrás; estas son las cintas que más se han destacado.

Imagen: europeana.eu
Imagen: europeana.eu

Después de presentar varias veces la película titulada «Gioconda,» la empresa, a solicitud de algunas familias, volvió de nuevo a ofrecerla al público con bastante éxito. También se estrenó «El ángel del obrero.»

TEATRO ESLAVA, Empresa Pedroso —  Después que sufrió el cruel atentado en que tuvo fuertes pérdidas, cedió el teatro a una nueva empresa que con el nombre de actores mejicanos actuó durante algún tiempo sin alcanzar éxito. Luego aparecieron «Los bufos cubanos,» bajo la dirección del Sr. Miranda, y algunos estrenos de buenas películas, volviendo el desacreditado salón por su primitivo estado de esplendor. Hoy se encuentra a cargo del incansable empresario Abascal y Vega, que pone sumo cuidado en la selección de las cintas cinematográficas.

Últimamente ha presentado la interesante película de notable argumento titulada «Pureza.» Es la nota apasionada de todos los salones y la hablilla de todos los corrillos. «Pureza» ha dado el último toque de triunfo salvando a la empresa. Ha sido el ave-fénix del Eslava.

El «Principal» continúa cerrado.

R. A. Miranda. Veracruz, Marzo de 1917.

Los entuertos de Tabaré (1918)

Varios entuertos, por llamarlos de alguna forma, tuvo la cinta de Luis Lezama, Tabaré, filmada en 1917 y producida por la México Film, S. A. Esta cinta que se basó en el poema de Juan Zorrilla de San Martín tuvo varias menciones en la revista Cine-Mundial. Desde la filmación en Veracruz de la obra, que por cierto fue la primera cinta de ficción hecha en aquella geografía nacional. También parece ser que hubo problemas de derechos de autor; además no fue del agrado del corresponsal en México de la revista, Epifanio Soto. Finalmente, la cinta fue llevada a Nueva York para su exhibición, sin que sepamos si al final del periplo se logró proyectar en la urbe de hierro. Hasta The Moving Picture World hizo mención de la filmación de la cinta en una escueta nota al respecto.

La película se estrenó en la ciudad de México en el Teatro Arbeu el 31 de enero de 1918, según información de María Luisa Amador y Jorge Ayala Blanco en Cartelera cinematográfica, 1912-1919.

En orden cronológico están las breves notas que sobre la cinta publicó Cine-Mundial y la nota aparecida en The Moving Picture World.

La nota del semanario norteamericano se publicó el 5 de enero de 1918 y es probable que el redactor de la noticia en español, publicada en el ejemplar correspondiente a febrero, se haya basado en la nota del mes anterior en su versión en inglés.

Motion Picture Made in Vera Cruz

The Moving Picture World (Vol. XXXV, No. 1, p. )
The Moving Picture World (Vol. XXXV, No. 1, p. 57)

The first motion picture to be taken in the State of Vera Cruz with the exception of those relating to current events, was made recently by the Mexican Film Company, of Mexico City, according to United States Consul William W. Canada, Vera Cruz, Mexico. The subject chosen were scenes between Spaniards and Indians from «Tabaré,» a work by the Uruguayan poet, Juan Zorrilla de Sammartín (sic), and the place selected was a picturesque tropical ranch at Boca del Río, a short distance south of Vera Cruz. The apparatus and supplies were purchased in New York.

Película mexicana

Por primera vez se ha impresionado en Veracruz una película dramática, según informe de nuestro corresponsal. La iniciativa se debe a la Compañía Mexicana de Películas, establecida en la capital de la República. El argumento del fotodrama está tomado de «Tabaré,» obra del poeta uruguayo Juan Zorrilla de San Martín, y las escenas entre indios y españoles se impresionaron en una hacienda pintoresca de Boca del Río, a corta distancia de Veracruz. Todos los aparatos y accesorios que se usaron en la parte técnica fueron comprados en Nueva York. (Cine-Mundial de febrero de 1918, Vol. III, No. 2, p. 94)

La segunda mención que hace Cine-Mundial es del corresponsal de la revista y es parte de su columna mensual. La crítica a la cinta comparte espacio con una entrevista a Mimí Derba y la campaña anti-americana contra las películas de ese país.

La Cinematografía en Méjico

Últimos sucesos

Tabaré — Con una cinta de este nombre, adaptación del poema de Zorrilla de San Martín, ha debutado la marca Méjico Film Co., S. A.

El cuadro de artistas que para interpretarla se reunió, fué competentísimo, si se le compara con los reunidos por otras compañías: Carmen Bonifant encarnó a Blanca de Orcaz y Manuel del Castillo a Tabaré. Aquélla tuvo momentos felices; pero su labor no fué muy buena, pues carece de mímica. Castillo hizo un Tabaré desastroso: abusó de las posturas arrogantes y su andar, exageradísimo, en vez de gallardo resultó ridículo.

Los paisajes, aunque repetidos con frecuencia, fueron muy gustados y a ellos se debe, en gran parte, el éxito de la producción.

El argumento—gran monarca de nuestro público—garantizaba el éxito; el vestuario fué tan pobre, que cada actor luce un solo traje en las 10 partes de la cinta.

Resumen: una película mala, que gustó.

Epifanio Soto (hijo). (Cine-Mundial de junio de 1918, Vol. III, No. 6, p. 339)

Tabaré (1917)
Fotograma de Tabaré (1917) de Luis Lezama

Las dos restantes notas sobre el filme se refieren a los problemas legales y el posterior viaje a Nueva York para su exhibición.

Embrollo cinematográfico

La película «Tabaré,» filmada recientemente en México, está siendo objeto de extensos comentarios en la prensa profesional de Sud América. Según se alega, el poeta uruguayo Juan Zorrilla de San Martín, autor de la obra en que se basa el fotodrama, cedió los derechos cinematográficos a la Empresa Barreiro, de la Argentina, y estaba completamente ajeno a las actividades de la casa mexicana. Estos casos suceden a diario, y continuarán sucediendo mientras no se implante un cambio radical en las leyes sobre propiedad literaria vigentes en casi todos los países de la América Latina, que por lo general sólo protegen al que usurpa derechos. (Cine-Mundial de junio de 1918, Vol. III, No. 6, p. 343)

Tabaré en Nueva York

Los Sres. Sotelo y Harrington traen un ejemplar de la película.

Hace aproximadamente dos semanas llegaron a esta metrópoli los Sres. Juan G. Sotelo y B. Harrington, procedentes de México, con un positivo de «Tabaré,» fotodrama de metraje extraordinario recientemente estrenado en la vecina república.

Según nuestras noticias, la película pronto pasará a manos, bajo contrato, de conocida empresa neoyorquina para todo lo referente a su explotación en los Estados Unidos.

Aunque todavía nada puede decirse en definitiva es muy probable que la cinta no se alquile en programa corriente, sino que se proceda a la venta por Estados de los derechos de exhibición.

Los Sres. Sotelo y Harrington permanecerán en Nueva York todo este mes. (Cine-Mundial de agosto de 1918, Vol. III, No. 8, p. 509)

Cinematógrafo en Veracruz (1916)

Nota publicada en Cine-Mundial de diciembre de 1916 (Vol. I, No. 12, p. 515) de la pluma del corresponsal R. A. Miranda. Aunque el título de la nota es De México, ésta columna no se circunscribe a la capital del país en exclusiva. Hay varios corresponsales que mandan información de Veracruz, Guadalajara, Tuxtla Gutiérrez o Mérida. A dos años de la invasión norteamericana — abril-mayo de 1914– se constata por la nota que la vida cotidiana en el puerto había vuelto a cierta normalidad.

De México

Puede decirse que la cinematografía ha alcanzado un completo éxito en el puerto. Hay cuatro teatros; tres de ellos explotan actualmente el cinematógrafo.

El «Olimpia» lo tiene el Sr. Amado P. Pedroso, empresario incansable que no repara en gastos ni sacrificios de ninguna especie para obtener las más grandes creaciones. Hemos visto en la pantalla de ese salón a Francisca Bertini y Gustavo Serena, esas dos grandes figuras de la escena muda, en la «Dama de las Camelias,» «Asunta Spina,» «Odette,» «Diana la Fascinadora,» y en fin en algunas otras películas que, como las anteriores, han emocionado hasta lo increíble al público veracruzano. Otro de los éxitos de la empresa del citado teatro «Olimpia» ha sido exhibir la colosal creación de Pina Menicheli, «El Fuego.» Esta hermosa y genial artista pone en la interpretación de este «film» toda su belleza y todo su arte. Se repitió en la pantalla por varios días la exhibición y, como siempre, el teatro estaba pletórico de espectadores.

El puerto de Veracruz a principios del Siglo XX
El puerto de Veracruz a principios del Siglo XX

Hemos llegado a observar que mucho público ha dejado de asistir al teatro «Principal,» prefiriendo asistir a los cinematógrafos, a pesar de que en aquél actuaba la compañía de ópera de la Empresa de M. Sedaño, y de que en esa compañía se encontraban elementos tales como la hermosa Pilar Rocha, soprano dramática bastante aceptable; el modesto y buen tenor Edmundo Anaya, así como los barítonos Romero Malpica y Torres Ovando. En cambio el «Olimpia,» «El Variedades» y el cine en el malecón al aire libre, se ven a diario repletos de gente al grado de que en muchas ocasiones se ha puesto en las taquillas el aviso de que no hay boletos.

En «El Variedades» se han exhibido también hermosas películas, tales como «Maciste,» «Salambo,» «Cabiria,» «El Submarino No. 27» y «Los Misterios de Nueva York,» película de 22 episodios emocionantes todos.

Todas estas cintas son introducidas por las casas de Navacues y Camus, Sres. Alvarez y Arrondo, y la «Cinema-México,» que dirige el Sr. A. E. Martínez.

R. A. Miranda.

Veracruz, Octubre de 1916.